Atravesar el bosque

 

Hay un bosque, es un bosque mágico porque cambia de colores.

 

De un lado del bosque está tu casa, tu lugar seguro, del otro lado está todo lo demás, la escuela, el trabajo, las vacaciones, los amigos, la familia. Todos los días debes atravesar el bosque, a veces es multicolor, cuando está en calma. Pero otras veces es azul, es porque sientes tristeza, o naranja cuando sientes euforia, amarillo cuando sientes molestia, rojo cuando sientes temor. Pero aún, cuando el bosque cambia de color tú debes atravesarlo para ir al trabajo o a la escuela, a con tus actividades diarias, puedes claro, darle la vuelta al bosque, eso te lleva tres días, o puedes atravesarlo, eso te lleva una hora.

 

Un día estás triste y te cuesta trabajo inclusive levantarte de la cama, pero del otro lado te espera un examen muy importante, finalmente decides levantarte y atravesar el bosque, te das cuenta de que ahí dentro todo es azul como tú y eso te da cierta comodidad, hay cosas que te hacen querer quedarte, las ardillas te ofrecen nueces de la tristeza, los pajaritos cantan canciones azules, el musgo del suelo te realenta el paso y comienza a llover un agua saladita y cálida, de una cabañita sale una viejita y te da una taza de té, te sientas a tomarla mientras te sientes súper triste.

 

El bosque es mágico también porque no te permite detenerte por completo, las piedritas, las ramitas, hasta las ranas y los carpinteros te empujan y deslizan para que sigas avanzando y en menos de lo que canta un gallo estás del otro lado llegando al colegio para rendir ese examen tan importante, te da gusto ver a tus amigos, el sol brilla fuerte y es reconfortante entrar a la sombra del salón, las personas a tu alrededor sonríen, te saludan y cuando te sientas en tu silla puedes reconocer que ya no sientes tristeza, miras por la ventana y el bosque otra vez es multicolor, te felicitas por haberlo atravesado, necesitaste juntar toda tu voluntad, valentía y amor propio para hacerlo, bien hecho!

 

La próxima vez que reconozcas que sientes tristeza, miedo o alegría, atraviesa el bosque mágico, vivir las emociones es parte de nuestro viaje en el mundo, las emociones nos ayudan a comprender el mundo y comprendernos a nosotras mismas, no te quedes encerrada en tus pensamientos y tampoco trates de darle la vuelta al bosque porque vas retrasar tu viaje y no vas a conocer nada nuevo.

 

Escribe un mensaje para ti misma en tu libreta: Recuerda siempre, siempre atravesar el bosque mágico